El maíz, millo, elote, choclo o Zea mays (su nombre científico en latín) es una gramínea anual originaria de las Américas introducida en Europa en el siglo XVI. Actualmente es el cereal con mayor volumen de producción en el mundo, superando el trigo y el arroz. En la mayor parte de los países de América, el maíz constituye la base histórica de la alimentación regional y uno de los aspectos centrales de la cultura mesoamericana.
Zea mays desarrolla inflorescencias masculinas y femeninas en la misma planta. Ésta es anual y su rápido crecimiento le permite alcanzar hasta los 2,5 m. de altura, con un tallo erguido, rígido y sólido; algunas variedades silvestres alcanzan los 7 m. de altura.
El tallo está compuesto a su vez por tres capas: una epidermis exterior, impermeable y transparente, una pared por donde circulan las sustancias alimenticias y una médula de tejido esponjoso y blanco donde almacena reservas alimenticias, en especial azúcares.Las hojas toman una forma alargada íntimamente arrollada al tallo, del cual nacen las espigas o mazorcas. Cada mazorca consiste en un tronco u olote que está cubierta por filas de granos, la parte comestible de la planta, cuyo número puede variar entre ocho y treinta. El maíz es absolutamente capaz de reproducirse por sí solo. Las plantas caídas y con sus espigas en contacto con la tierra, y condiciones de humedad, aseguran la perpetuidad de esta especie anual.Fue una de las primeras especies importadas de América, en una fecha tan próxima al descubrimiento que planteó serias dudas sobre su auténtico origen. Esta temprana adopción, muy probablemente, fue debida a su semejanza con los cereales europeos, a diferencia de otras plantas, como la patata, que eran más extrañas y hasta sospechosas. Sin embargo, no fue importante para la alimentación de los europeos hasta bien entrado el s. XIX.